La mas reciente novelucha de Garracol lleva por título Hilos de Terror, pero al margen de la poca creatividad de esos nefastos libretistas para crear una historia tan trillada y ridícula, hay que condenar al que se le ocurrió la idea de contratar para los roles principales a dos brujas carentes de talento y belleza como son Carogurre Acevedo y Carogurre Guerra.
La Acevedo es una flaca horrorosa con cara de Transformer, cuyo hijo recien nacido ya puede ir sintiendo vergüenza por semejante madre.La otra, la Guerra, no pasa de ser un indio transexualesco al que le tocó juntarse con el galán de circo Diego Fracasid para confundir aun más al público, porque en esa pareja no se sabe quien es el macho y quien la hembra.
Con gusto le desearía todo el fracaso del mundo a Hilos de Terror pero con esa producción tan mediocre, digna de Garracol, y unas protagonistas tan indeseables como esas dos sé que no hace falta. Solo me pregunto cuando nos quitarán el castigo de ver en televisión a tremendas fealdades sin gracia ni chiste.
viernes, 8 de octubre de 2010
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